Los legisladores de Maryland, EE. UU., votaron el sábado 9 de abril, anular el veto del gobernador del estado al proyecto de ley que permitía a cualquier profesional de la salud realizar un aborto.

El gobernador republicano, Larry Hogan, había vetado el viernes el proyecto de ley, HB 937, alegando que “corre el riesgo de reducir el alto nivel de los servicios de atención de la salud reproductiva que reciben las mujeres en Maryland. Estos procedimientos son complejos y pueden, y con frecuencia resultan, en complicaciones médicas significativas que requieren la atención de un médico licenciado”.

Además, indicó que “el único impacto que tendría este proyecto de ley sobre los derechos reproductivos de las mujeres sería el de hacer retroceder los estándares para el cuidado de la salud y la seguridad de las mismas”.